Una falsa alarma de incendio causó confusión en la Universidad Politécnica de San Luis Potosí (UPSLP) cuando se informó sobre un supuesto siniestro en sus instalaciones. Sin embargo, el personal administrativo aclaró que no hubo tal incidente, sino que las alarmas se activaron debido al uso de vapeadores por parte de algunos estudiantes, lo que generó humo y provocó la alerta.
La alarma no llegó a involucrar al Cuerpo de Bomberos, ya que no fue necesario realizar acciones de emergencia. Aunque algunos medios de comunicación dieron seguimiento al incidente, rápidamente se confirmó que no hubo fuego ni personas lesionadas.
El uso de vapeadores en la institución resaltó un tema de salud pública que ha sido objeto de advertencia desde 2021, cuando la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic) alertaron sobre los riesgos de estos productos. Los vapeadores, conocidos también como cigarros electrónicos, son altamente adictivos y dañinos para la salud debido a las sustancias tóxicas que emiten, entre ellas metales como cadmio, níquel y plomo.
Estos productos, identificados como Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina (SEAN) o Sistemas Similares Sin Nicotina (SSSN), pueden tener efectos perjudiciales a largo plazo, especialmente en el desarrollo del cerebro en adolescentes y fetos. Un solo cartucho con sal de nicotina puede ser equivalente a fumar varios paquetes de cigarrillos, lo que pone de manifiesto los graves riesgos asociados con su uso.
