A fin de frenar la ola de robos a casa habitación que han padecido desde hace varios meses en la colonia Santa Mónica, vecinos de ese sector se vieron forzados a tomar medidas de seguridad como la instalación de cámaras de vigilancia y cerrar calles con tambos de plástico y metálicos.
De acuerdo con los afectados, la operación de delincuentes ha generado un ambiente de intranquilidad entre los residentes, debido a que los atracos ya están a la orden del día.
De acuerdo con Abraham, vecino de la calle Santa Rosa de Lima, en al menos dos ocasiones han visto cómo los rateros se escabullen entre las parcelas o terrenos que conducen a la colonia Genovevo Rivas Guillén.
Refirió que incluso abrieron un boquete en una iglesia cercana, así como en otras viviendas de esa calle.
Agregó que a uno de sus vecinos le robaron su vehículo, en otra casa más pretendieron ingresar, pero no lo lograron, mientras a que a otra vecina hasta con grúa se llevaron una camioneta que recién había adquirido.
Además, dijo que asaltaron hace poco una tienda de abarrotes y a un repartidor de Bimbo.
“Rebasaron los límites, se han llevado los vehículos hasta con grúa, hacen boquetes, la calle la tomaron como un camino de arrancones y de salida rápida, por lo mismo decidimos cerrarla, queremos cerrar otra más para protegernos y tratar de alejar a estas ratas, hay gente que no tiene por qué entrar por aquí, porque es cerrada, pero son los rateros que ya nos han quitado en la noche los tambos para querer entrar”, aseguró.
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