Un caso polémico en Monterrey, Nuevo León, ha generado numerosas reacciones en redes sociales después de que un hotel le negara el acceso a una mujer con discapacidad visual porque iba acompañada de su perro guía. Sary, la joven afectada, compartió su experiencia a través de un video viral en el que documentó cómo el Hotel Safi se negó a dejarla entrar al recinto ubicado sobre la avenida Pino Suárez y 15 de Mayo, en el Centro de la ciudad.
Sary explicó que, a pesar de mostrar su credencial que certifica su condición y el propósito de su visita, los empleados del hotel insistieron en que no podían permitir la entrada del perro guía debido a las políticas del lugar que prohíben las mascotas. La joven iba acompañada de su perro Odín, no como una mascota ordinaria, sino como un perro de asistencia vital para su movilidad y seguridad.
La situación se complicó aún más cuando el personal del hotel ofreció la opción de que Sary entrara asistida por una persona, pero que Odín se quedara fuera, argumentando que podría molestar a otros huéspedes o comensales. A pesar de las dificultades, Sary logró explicar que Odín no era una mascota común y logró convencer al personal de permitirles la entrada. Así, ella y su perro pudieron disfrutar de la posada navideña organizada por su empresa en el hotel.
Este incidente resalta la importancia de que las empresas comprendan y respeten los derechos de las personas con discapacidad visual y su necesidad de acceso a los servicios, incluso cuando se trata de su perro guía, quien es esencial para su bienestar y seguridad. El apoyo en redes sociales hacia Sary subraya la necesidad de un mayor entendimiento y adaptación en las políticas de los lugares públicos para asegurar que todos tengan las mismas oportunidades de acceso y disfrute.
