El piloto inglés Justin Wilson falleció debido a una herida en la cabeza, la cual sufrió cuando una pieza de un automóvil se desprendió durante una carrera el domingo de la IndyCar, en el circuito de Pocono. Tenía 37 años.
IndyCar hizo el anuncio el lunes en el Indianapolis Motor Speedway. Wilson residía en las afueras de Denver, Colorado.
La autoparte que hirió a Wilson salió volando tras el choque de otro vehículo con el muro de contención. El proyectil impactó en la cabeza de Wilson, quien perdió el control de su monoplaza y se estrelló directamente contra la pared.
Fue trasladado de inmediato en helicóptero a un hospital de la ciudad de Allentown, en el estado de Pennsylvania.
El último piloto de IndyCar que murió en un accidente en la pista fue el también inglés Dan Wheldon, un ganador de las 500 Millas de Indianápolis.
Wheldon falleció en la última carrera de la temporada de 2011, luego que su auto se vio involucrado en un aparatoso accidente, en el que 15 vehículos colisionaron y varios se incendiaron.
El bólido de Wheldon voló por encima de otro vehículo y cayó en la alambrada de la pista en Las Vegas. La cabeza del piloto golpeó contra un poste de la cerca, y el deceso ocurrió de forma instantánea.
Aquella fue la última muerte en una categoría en la que fallecieron también pilotos como Scott Brayton (1996), Tony Renna (2003) y Paul Dana (2006).
Fuente: Adrenalina