Tyre Sampson, un jugador de futbol americano de una escuela de educación media de Missouri que a sus 14 años ya medía 1.95 metros (seis pies y cinco pulgadas) y pesaba más de 136 kilos (300 libras), murió al caer de una altísima atracción en Florida.
El hecho ocurrió en ICON Park, ubicado en el distrito turístico de Orlando, y tras ser atendido en el lugar el joven fue trasladado un hospital, donde posteriormente pereció a causa de sus heridas, según la Oficina del Alguacil del Condado de Orange.
En rueda de prensa ofrecida, el alguacil de este condado, John Mina, dio cuenta de la identidad del fallecido. Se trata de Tyre Sampson, de Missouri y quien se encontraba en Orlando de visita con amigos y familiares.
“Basada en las investigaciones preliminares, todo apunta a que ha sido un terrible accidente“, agregó el jefe policial, quien extendió sus condolencias a los familiares del joven.
Sampson cayó desde la atracción Orlando Free Fall, que empezó a operar en diciembre pasado y es promocionada como la torre de caída libre más alta del mundo.
Medios locales aluden a videos que circulan en redes sociales, en los que presuntamente se escucha a los pasajeros de la atracción hablar sobre la seguridad de los asientos, tras lo cual la máquina empieza a trasladar a las personas hacia arriba.
Investigan juego donde cayó Tyre Sampson
Los abogados de su familia desean saber si negligencia respecto a su tamaño, u otros factores, tuvieron que ver con su muerte.
“Este joven era atlético y grande. No tenía forma de saberlo”, dijo Bob Hilliard, un abogado de Texas que representa a la madre de Tyre, Nekia Dodd, en una entrevista el sábado. “Este será un caso de falta de supervisión y de capacitación. Un asunto de negligencia absoluta”.
El sábado, los responsables de la investigación seguían examinando lo sucedido el jueves por la noche, cuando Sampson se cayó de su asiento desde una atracción de parque de diversiones de 131 metros (430 pies) de altura, que es más alta que la Estatua de la Libertad, instalada en una concurrida calle en el corazón del distrito turístico de Orlando, no muy lejos de Disney World.
Dicha atracción eleva a los usuarios hasta esa altura, se inclina para que miren al suelo durante uno o dos instantes y luego cae en picada hacia el suelo a velocidades de unos 121 kilómetros por hora (75 millas por hora) o más.
El reconocido abogado de derechos civiles Ben Crump, que trabaja con Hilliard y representa al padre de Tyre, Yarnell Sampson, dijo que la familia está “conmocionada y desconsolada por la pérdida de su hijo.”
“Este joven era el tipo de hijo que todo el mundo espera: un estudiante del cuadro de honor, un deportista en ciernes y una persona de buen corazón que se preocupaba por los demás”, dijo Crump el sábado en un comunicado.
La policía del condado Orange y el Departamento de Agricultura y Servicios al Consumidor del estado, que regula las atracciones de Florida en todos los parques de diversiones excepto en los más importantes, declinaron hacer comentarios el sábado más allá de decir que la investigación sigue en curso.
En un comunicado, el parque de atracciones Icon Park indicó que está cooperando plenamente con los investigadores y que la atracción FreeFall de Orlando estará cerrada indefinidamente.
“Estamos desconsolados por el incidente que cobró la vida de uno de nuestros invitados. Ofrecemos nuestras condolencias y profundo pésame a su familia y amigos”, se lee en un comunicado del SlingShot Group, que opera la atracción.
Milenio