Los Simuladores

Uncategorized

Hay una palabra que detesto y que rara vez la utilizo, pero que finalmente ayuda a definir de manera efectiva ciertas situaciones. Esta palabreja es “wannabe”

Ser un wannabe tiene una connotación bastante triste y ridícula, estamos de acuerdo, pero finalmente el que lo es, difícilmente se dará cuenta de ello. Sin embargo, hay algunos tan pulidos en tal arte, que consiguen que muchos se traguen el cuento. Pero finalmente las cosas caen por peso propio y ¡saz! El simulador termina puesto en evidencia y nos termina regalando unas buenas risas.

En el Blues hay uno de estos infames, y es curioso como a logrado espacio y reconocimiento mundial. El fulano en cuestión es un tipo llamado John Mayer.

El amigo este es graduado de Berkley en Boston, un músico bien preparado, buen cantante y niño bonito -eso si alguien de 36 o 37 años se le pueda decir niño bonito- el muchacho se pasea desde revistas especializadas de guitarra a revistas de chamaquitas adolescentes. Lo cual es insólito, pues el tipo se consolida como ídolo de estas, de guitarristas emergentes y sueño ideal de alguno que otro pedófilo.

Tu no puedes ser un músico de Blues graduado de una de las escuelas de música mas caras del mundo. ¿Por que afirmo esto? Bien, pues porque el Blues es una de las músicas mas descarnadas y honestas que existen. Su tradición se basa en el sufrimiento y reclamo de una raza al principio, y que después no fue solo una raza sino toda una clase social. Y es de una clase que jamás podrían pensar en gastar 20 mil dólares el semestre para tomar unas simples lecciones de guitarra. Para eso, mejor un pacto con Satán.

Desgraciada o afortunadamente con el Blues no existen medias tintas. Esto por su naturaleza de ser arte de origen. Si lo tocas correctamente, puedes beber al lado de Muddy Waters. Si no lo haces correctamente, eres cuando mucho El Tri o algo peor.

No puedes tocar Blues vestido con un traje Armani de 10 mil dólares en el Royal Albert Hall como lo hizo Clapton. Eso fue una farsa. Simplemente no puedo creer que alguien que sale en las portadas de revistas de quinceañeras pueda sentir con su guitarra el peso de la miseria humana en el lomo, como simplemente no puedo creer que alguien diga que toca el Blues por el simple hecho de decirlo.

No puedes tocar Blues si solo lo puedes hacer en festivales organizados por el gobierno, y recibiendo dinero de ahí. No puedes decirte un músico de Blues cuando tu canción mas “blues” cuando mucho llega a ser una canción humorística. La tradición del Blues en nuestro país es lamentablemente rupestre y vaciada. Y por supuesto inexistente.

El arte con valor, rehuye de los clichés. Si tocas el Blues, los demás lo determinaran cuando les tasajees el pecho con la guitarra. Si no sucede, pues sencillamente no lo estas haciendo.

Hay wannabes por todos lados. Hay wannabes pintores. Conozco a varios wannabes intelectuales que hasta se toman el tiempo y la importancia de escribir babosadas. así justo como esta nota. Una vez vi un policía ministerial, feo y estúpido como pocos, pero traía su plaquita colgada al mas puro estilo de CSI Miami.

La otra tarde vi una foto de un cantante de rock nacional llamado Charly Montana. El tipo físicamente es poseedor de la imagen indígena mas representativa del centro del país. Lo cual esta muy bien. Bueno, estaría muy bien si no se tiñera el cabello de rubio platinado y no trajera una bandera confederada tatuada en el brazo…

Y para acabar ya con los odiosos ejemplos, les digo que sobran los políticos imbéciles que sienten ¡Estadistas! Cuando mucho son simples y vulgares ladrones. Y créanme que la ciudad donde vivo la dirige uno de esos, ademas de gordo y bastante tonto.

En 1972 en la prisión de alta seguridad de Sing Sing en Nueva York Joan Baez y BB King dieron un concierto de día de gracias. Coincidió en que unos jóvenes cineastas hacían trabajo social en la prisión mostrando técnicas fílmicas a algunos internos. Lo que filmaron con cámaras semi profesionales fue un testimonio estremecedor el cual se convirtió en un documental. Ahí hay hombres duros que nunca se plantearon estos temas que platicamos. Ahí hay hombres llenos de tormento. Ahí hay violencia y muerte por todos lados.

Ahí había hombres con el corazón roto. Y ahí estaba BB King tocando el verdadero Blues.

 

Fernando Charó.
Twitter: @fernandocharo

Compartir ésta nota:
Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp