Con el respaldo de 108 votos, el pleno del Senado aprobó la prohibición del uso de la imagen de las mujeres para transmitir mensajes sexuales o degradantes de ellas.
“Se entiende por información o publicidad que muestre estereotipos sexistas, degradantes, peyorativos sobre las mujeres, aquella que presente hechos, acciones, símbolos o expresiones que atribuyan o asocien características denigrantes, de exclusión, de sumisión, de racismo, de burla, de animadversión o cualquier otra forma de discriminación hacia el género femenino”, establece la reforma a la Ley federal de Protección al Consumidor.
“Ni una vez más la figura de las mujeres como estereotipo que degrade nuestro género y a nuestra sociedad”, resaltó la senadora Diva Gastélum, presidenta de la Comisión Para la Igualdad de Género.
Se trata de una reforma que fue propuesta por el ex senador Carlos Navarrete Ruiz, entonces coordinador de los senadores del PRD, durante la LXI Legislatura, y tiene el propósito de procurar la equidad y certeza entre el consumidor y los proveedores, se propone, que entre los principios básicos de las relaciones de consumo, se incluya la protección contra la publicidad que muestre estereotipos degradantes.
De acuerdo con la exposición de motivos, algunos estudios han demostrado incluso que en la mayoría de casos la mujer sigue apareciendo en los anuncios como madre o consumidora, al mismo tiempo que es aconsejada, informada o ayudada a decidir con un personaje masculino.
Estos datos, precisan las comisiones, reflejan el cuestionamiento del discurso femenino contra prácticas discriminatorias, en lugar de confirmar métodos o discursos de igualdad de género y su apertura para que la mujer intervenga a la par en el espacio público.
Añade que los medios de comunicación reportan en la categoría de personajes de “autoridad” la presencia de 80% de los hombres y sólo 20% son representados por mujeres.
Agrega que en la publicidad, la mujer que presenta intelecto es mostrada muchas veces como una persona inestable emocionalmente, frívola o nada tierna, “pero sobre todo con un propósito de venganza o con antecedentes de haber sido beneficiada por dejarse someter sexualmente”.
Estimaron que este tipo de prácticas no permiten la apertura para que la mujer intervenga en el espacio público y no contribuye a procurar la equidad y certeza entre el consumidor y los proveedores.
La panista Rosa Adriana Díaz Lizama consideró que esta reforma “es una iniciativa muy importante, una lucha que hemos tenido no sólo las mujeres de este Senado, sino de varias legislaturas anteriores y a que se propone adicionar a la Ley la Protección a la Mujer en publicidad que la muestre con estereotipos de sumisión o dependencia a la figura masculina, a la vez que define la información o publicidad que muestre estereotipos sexistas, degradantes, peyorativos sobre las mujeres”.
Diva Gastélum añadió que “uno de los temas fundamentales es cómo la figura femenina en cualquiera de su edades, desde la niñez, hasta la tercera edad, pero especialmente en una etapa, se usa con fines publicitarios, pero es discriminatorio, es atentatorio.
“Lo que estamos pidiendo es poder regular eso en la Ley del Consumidor, pero también que eso fije un precedente para la reforma que en muy breve estaremos discutiendo que es el de Telecomunicaciones, no puede ser posible que se siga estereotipando y que se sigan manejando sexistamente la publicidad y se degrade la figura femenina.”
