Revelan detalles de la golpiza que Daniel Bisogno habría dado a su esposa

La polémica vida del conductor de Ventaneando Daniel Bisogno continúa dando de qué hablar, pues aseguran que es una persona violenta y que la razón por la cual su esposa Cristina Riva Palacio tomó la decisión de separarse de él no fue de mutuo acuerdo, más bien se vio orillada a divorciarse por las golpizas que le daba.

Riva Palacio lo acusó de ser una persona violenta y de humillarla constantemente; por lo que una persona cercana a la familia reveló información confidencial del presentador de televisión a la revista TVNotas.

El testigo comentó que cada vez que Daniel Bisogno salía de fiesta, tomaba alcohol y consumía drogas, en cuanto llegaba a su casa se desquitaba con Cristina, al grado de ofenderla y golpearla.

Platicó que antes de que Cristina se saliera de la casa que compartía con Bisogno, ella sufrió una terrible golpiza que la mandó al hospital y el saldo fue un derrame en el ojo y tres costillas fisuradas.

La persona cercana a la familia dejó a todos helados con la confesión que hizo, pues resulta que Cristina le tiene mucho miedo a Daniel Bisogno debido a sus arranques de ira con los que se terminaba desquitando con ella.

Reveló que la aún esposa de Bisogno se encuentra tranquila, ‘ya empezó con los trámites de divorcio y actualmente vive con su hermana mayor, Anina. En su nueva casa no siente el terror que Daniel le generaba todos los días’, comentó.

Dijo que meses antes de que Cristina se fuera de la casa en la que vivía con el conductor de Ventaneando, él empezó a tener actitudes muy agresivas y a golpearla; por lo que ella corría a casa de su hermana para que la protegiera.

Señaló que Daniel bebía todos los días y se drogaba; por lo que cuando llegaba a su casa se desquitaba con su esposa para sacar sus frustraciones de la vida.

“Le gritaba que era una muerta de hambre, una descerebrada, inútil y enferma mental. Al principio sólo eran gritos, pero conforme pasó el tiempo las cosas subieron de tono y empezó a pegarle. Le dio tres o cuatro golpizas, pero en la última, en abril, no midió su fuerza”.

Sobre la última golpiza, dijo que la mandó al hospital, por lo que las fotos que existen como evidencia de los golpes y los estudios que le hicieron, le sirvieron como pruebas para la demanda de divorcio.

La Neta Noticias

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