En el cruce de avenida Industrias con la calle Francisco Martínez de la Vega, numerosos automovilistas y conductores de camiones urbanos y de carga padecen no solo por una permanente fuga de aguas negras, sino por un conjunto de “mega baches” de gran profundidad que ya se ha cobrado más de una víctima.
Los hoyancos son numerosos y cada día que pasa se ensanchan más por el caótico paso de los vehículos pesados y la humedad que generan las aguas escapadas del drenaje.
Algunos, de profundidad mayor a los 15 centímetros, están ocultos bajo la sucia capa de agua y no son detectados a tiempo por los infortunados conductores de autos pequeños. Más de alguno ha quedado varado en ellos y se ha necesitado el auxilio de una grúa para rescatar la estropeada unidad.
La calle Martínez de la Vega es transitada con frecuencia por personas que desean tomar la avenida Industrias con rumbo al periférico y evitar así el tráfico lento de la lateral de la carretera 57. En este flujo van incluidos los camiones urbanos de diversas rutas que se dirigen hacia la Zona Industrial de San Luis Potosí.
PULSO