En la actualidad, la Casa de la Caridad Hogar del Migrante brinda apoyo a entre 40 y 50 infantes de origen haitiano, que van desde recién nacidos a los 7 años de edad.
Marco Antonio Luna Aguilar, sacerdote y director del albergue, reportó que una de las grandes necesidades del complejo de asistencia humanitaria, es leche en polvo para todas las etapas, así como pañales y cobijas para los infantes.
En entrevista, el también representante legal de la Arquidiócesis de San Luis Potosí, dijo que la papilla enlatada también es un complemento importante en la alimentación de los menores de edad, pues dada la emergencia es un producto práctico para alimentarlos.
Después de acudir a una reunión en la comisión de asuntos migratorios del Congreso del Estado, informó que hay insuficiencia de dichos insumos, dado que históricamente son productos que no se contemplaban en la asistencia a la comunidad migrante.
Por ello, el cura pidió a quienes deseen hacer sus aportaciones, acudan a Cáritas Diocesana, ubicada en calle de Álvaro Obregón 626, del Centro Histórico, o directamente en el albergue, localizado en la calle Juan Álvarez 210, en el Barrio de Tlaxcala.
“Tenemos una presencia de niños que nunca nos había tocado, precisamente 40 o 50 niños que tenemos ahorita. Son bebés desde recién nacidos hasta los 7 y los 8 años”, concluyó.
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