El fundador del Cártel de Guadalajara cumplió su sentencia y evitó la extradición a Estados Unidos
Ernesto Fonseca Carrillo, alias ‘Don Neto’, uno de los fundadores del narcotráfico moderno en México, fue liberado este sábado 5 de abril a los 94 años de edad, tras haber cumplido una condena de 40 años por el asesinato del agente de la DEA, Enrique ‘Kiki’ Camarena, y del piloto mexicano Alfredo Zavala.
De acuerdo con fuentes federales, Don Neto había permanecido en prisión desde 1985, cuando fue detenido por elementos del Ejército en una mansión en Puerto Vallarta, Jalisco. Desde entonces, fue recluido en distintos penales federales de máxima seguridad, hasta que en 2015 se le concedió la prisión domiciliaria por su edad avanzada y deterioro de salud.
El capo que evitó la extradición
A diferencia de sus antiguos socios, Don Neto logró librar la extradición a Estados Unidos. En 2015, el entonces canciller José Antonio Meade rechazó entregarlo a las autoridades estadounidenses, argumentando que ya había sido juzgado y sentenciado en México por los delitos en su contra.
Por el contrario, Rafael Caro Quintero —conocido como ‘el narco de narcos’— fue extraditado en febrero de este año junto a otros 28 integrantes del crimen organizado. Miguel Ángel Félix Gallardo, el otro fundador del Cártel de Guadalajara, permanece encarcelado en Estados Unidos y tiene previsto salir en 2029.

El origen del narco moderno
Nacido en Badiraguato, Sinaloa, en 1930, Fonseca Carrillo es considerado uno de los padres del narcotráfico en México. En los años 70, junto a Caro Quintero y Félix Gallardo, fundó el Cártel de Guadalajara, el primer gran grupo criminal que consolidó las rutas de tráfico de drogas hacia Estados Unidos.
Desde sus inicios, Don Neto se enfocó en la producción y distribución de marihuana, amapola y cocaína, aprovechando contactos en Colombia y la creciente demanda del mercado estadounidense. De este grupo delictivo surgirían más tarde organizaciones como el Cártel de Sinaloa.
El asesinato de ‘Kiki’ Camarena
Uno de los episodios más oscuros de la historia del narcotráfico fue el asesinato del agente de la DEA, Enrique Camarena, y del piloto mexicano Alfredo Zavala en 1985. De acuerdo con las autoridades estadounidenses, ambos habían documentado desde el aire las operaciones del cártel en el norte del país.
El 7 de febrero de 1985, ambos fueron secuestrados en Jalisco, y un mes después sus cuerpos aparecieron en Michoacán con señales claras de tortura. Este crimen provocó un rompimiento diplomático entre México y Estados Unidos, y desató una cacería contra los líderes del Cártel de Guadalajara.
Fonseca Carrillo fue detenido dos meses después, el 7 de abril de 1985, en Puerto Vallarta. Desde entonces, ha sido señalado por los fiscales estadounidenses como uno de los principales autores intelectuales del secuestro, tortura y ejecución del agente norteamericano.
Ahora, tras cuatro décadas, Don Neto vuelve a ser un hombre libre.