El Centro de Predicción del Clima Espacial de Estados Unidos ha emitido una alerta sobre una potencial tormenta solar de gran magnitud que podría impactar la Tierra en las próximas horas, causando graves perturbaciones en las telecomunicaciones globales.
Según la NASA, esta explosión solar podría generar corrientes en los campos magnéticos terrestres, enviando partículas hacia los polos norte y sur y creando espectaculares auroras boreales en ambos hemisferios.
El fenómeno, resultado de una eyección de masa coronal desde el Sol, se desplaza a una velocidad impresionante y podría alcanzar nuestro planeta en un lapso de tan solo 15 a 18 horas, advierte la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA).
Los científicos describen este evento como si el Sol lanzara un imán al espacio, interactuando con el campo magnético terrestre y desencadenando lo que se conoce como tormenta geomagnética.
Las consecuencias de esta tormenta podrían ser significativas, afectando la navegación, las comunicaciones y las señales de radio. Una tormenta de clase G4, como la que se espera, se considera “grave” y podría provocar importantes perturbaciones en el campo magnético de la Tierra, lo que podría resultar en problemas de voltaje, interrupciones en operaciones satelitales, sistemas de navegación y comunicación, así como en la red eléctrica.