Como sucedía a menudo, Manuel llegó borracho a la casa que compartía con sus familiares, en la colonia Lomas Estrella, en Iztapalapa; al igual que otras veces, agredió a quienes ocupan la vivienda y cuando su tío trató de calmarlo, lo apuñaló.
El señor Armando, invidente, de 65 años, salió al escuchar los gritos de su sobrina Priscila. Manuel la había atacado al ver que su cuarto estaba cerrado con cadena y candado, lo que desató su furia.
Manuel, quien tiene 47 años y trabajaba como mesero en un bar de Garibaldi y tenía cuatro ingresos a diversos reclusorios por robo, se lanzó contra su tío y lo hirió en dos ocasiones con un cuchillo en el tórax, suficiente para quitarle la vida.
Un hermano de Don Armando salió al patio al escuchar los gritos y se percató de lo que había sucedido. Ayudado por otros integrantes de la familia, quienes conocían los arranques violentos de su sobrino, lo desarmaron y luego lo golpearon hasta que perdió el sentido.
Don Armando fue trasladado al hosptal Xoco para atenderlo, sin embargo, al ingresar los médicos dictaminaron que ya había fallecido.
Su sobrina, Priscila, fue atendida en el hospital Balbuena por diversos cortes en la cara, mientras que el responsable de los ataques fue llevado al hospital General de Milpa Alta, donde se le internó en calidad de detenido.
El Gráfico
