En Colorado, Estados Unidos autoridades detuvieron a un conductor ebrio que iba a exceso de velocidad, pero su ingenio del hombre lo llevó a intercambiar el lugar con su perro y ponerlo al volante, para así confundir a los uniformados e intentar evitar que le pusieran una multa.
A través de un comunicado de la policía de Springfield, (no, no la de Los Simpson), las autoridades relataron que cuando detuvieron al coche por infringir la norma de tránsito se percataron que traía un perro y vieron el momento en el que el conductor cambió el lugar con la mascota para ponerla detrás del volante.
Conductor pone a su perro al volante para evitar una multa
Por si fuera poco, el conductor declaró que él no iba conduciendo y aseguró que su perro era el que llevaba el vehículo y que el animal no había bebido nada.
“El sujeto masculino luego salió del lado del pasajero del vehículo y afirmó que no estaba conduciendo“, señalaron las autoridades estadounidenses.
Luego de que el uniformado le preguntara al conductor ebrio si había consumido alcohol, el hombre intentó escapar; sin embargo, debido a su alto grado de intoxicación los oficiales lograron alcanzarlo a pocos metros de distancia.
El dueño del lomito intentó escapar, pero autoridades lograron detenerlo (Foto: Unsplash/Ilustrativa)
Tras la detención del sujeto, autoridades lo trasladaron a un centro médico de la zona para su revisión. Posteriormente se le arrestó por conducir en estado de ebriedad.
Además, de acuerdo con información de la agencia AP, el conductor ebrio tenía dos órdenes de aprehensión previas a su detención.
En cuanto al perrito conductor, este se le entregó a un conocido del dueño para que lo cuide mientras el hombre enfrenta su proceso legal. Incluso en el comunicado de las autoridades de Springfield estas detallan que el lomito “no enfrenta ningún cargo y fue dejado ir con solo una advertencia”.
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