El expresidente Luis Echeverría Álvarez, quien falleció la noche del pasado viernes 8 de julio a los 100 años de edad, quiso “aniquilar a todo aquel que no estuviera a favor de su pensamiento y su Gobierno” (1970-1976), afirmó Micaela Cabañas, hija del maestro y guerrillero Lucio Cabañas Barrientos.
En entrevista con Álvaro Delgado y Alejandro Páez en el programa de Los Periodistas que se transmite por YouTube a través del canal de SinEmbargo Al Aire, Micaela Cabañas indicó que Luis Echeverría pasará a la historia como uno de los peores presidentes de la historia del país por la opresión que ejercía sobre el pueblo.
“[Pasará a la historia] como un traidor a la Patria, sino es el peor de los presidentes de México, uno de los peores, porque lejos de proteger a la población, quiso aniquilar todo lo que no estuviera a favor de sus pensamientos o favor de lo que él decía era gobernar”.
La activista recordó que por más de 50 años los familiares de personas desaparecidas durante el Gobierno de Luis Echeverría han luchado para exigir que los responsables sean enjuiciados y paguen por sus actos, sin embargo, dijo, los culpables han comenzado a morir sin haber sido juzgados.
“Durante tantos años hemos luchado para que a nosotros se nos de justicia, la justicia no llega, ya pasaron muchos años y los opresores y las personas que nosotros pedimos se judicialicen pues se están yendo también, al igual que se están yendo las personas que lucharon por una Patria nueva, por una Patria mejor. Es doloroso para los familiares, pero yo creo que es más doloroso para el pueblo de México que no haya una verdad y que no haya justicia a 50 años de ese genocidio”.
Ante esta situación, Claudia Piedra Ibarra, integrante del Comité Eureka, afirmó en el mismo espacio, en una entrevista separada, que Luis Echeverría Álvarez, al igual que otros criminales, murieron y quedaron impunes.
“Murió como todos los criminales de este país que han muerto impunes, en paz y en su cama, nos duele que no haya hablado y sin haber sido juzgado como debió de ser por todo lo malo que hizo”.
Piedra Ibarra indicó que si se quiere terminar con la impunidad en el país, el primer paso debe ser que el expresidente sea sometido a un juicio post mortem.
“Claro que va a ser juzgado post mortem, debe de ser así, si es que se quiere acabar con la impunidad en este país”.
Al ser cuestionada sobre cuál era su sentimiento ante la muerte de Echeverría Álvarez, Micaela Cabañas aseguró sentir “mucho enojo e impotencia” pues el expresidente no pagó por la represión y los miles de desaparecidos que hubo durante su gobierno.
“(Siento) mucho enojo, mucha impotencia porque sabemos muy bien que nosotros estuvimos pidiendo por muchos años que se haga justicia de algún modo y que se judicialice ese cruel genocidio que hubo en contra de la familia Cabañas y en contra de la misma población guerrerense y los movimientos sociales que existieron en los años 70”.
Micaela Cabañas dijo que le hubiera gustado que Luis Echeverría antes de morir revelara en dónde se encontraban los restos de muchos de los desaparecidos y confesara ante un tribunal todos los crímenes que cometió.
“Me hubiera gustado que se hubiera ido ese señor sin haber por lo menos dicho dónde estaban muchos de los desaparecidos, qué hizo con ellos, cuál fue su motivación para hacerle tanto daño a la gente, a la población indefensa de Guerrero, qué era lo que lo motivó a estar en contra de la gente que pedía mejoras, que pedía bienestar para su entorno, muchas preguntas que me hubiera gustado reclamarle en un tribunal, él detrás de las rejas como una vez nos tuvo a nosotros siendo inocentes, pero él siendo culpable. Y sí, mucha impotencia, coraje, enojo y muchas otras cosas más que sonaría grosero decir”.
Luis Echeverría Álvarez, Presidente de México de 1970 a 1976, falleció la noche del viernes a la edad de 100 años en su residencia de Cuernavaca, en Morelos.
Echeverría fue actor clave en las matanzas del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco y del 10 de junio de 1971, conocida como el “Halconazo”, y durante su sexenio se emprendió una persecución y represión en contra de los opositores del sistema, un pasaje histórico conocido como la “Guerra Sucia”.
El año pasado, al cumplirse 53 años de la masacre de estudiantes en Tlatelolco, líderes del Movimiento del 68 exigieron reabrir el proceso judicial contra el expresidente Luis Echeverría, quien el pasado 17 de enero cumplió 100 años y se encontraba delicado de salud.
El expresidente dejó un legado oscuro marcado por la violencia de Estado, la represión y las desapariciones forzadas, según refieren analistas políticos.
Finalmente, Micaela Cabañas aseguró que espera que Luis Echeverría deje de recibir honores y que los luchadores sociales sean quienes tengan el reconocimiento por su labor en favor de la sociedad.
“No quisiera yo pensar que ellos no van a hacer algo para impedir que se le siga rindiendo honores, yo no quiero que se le rinda honores a traidores ni a asesinos, yo preferiría que se le rindiera honores a los verdaderos luchadores sociales, a los verdaderos impulsores de los derechos humanos, porque entonces estaríamos perdidos, la juventud de ahora estaría perdida si pensamos que ellos fueron héroes y no, que fueron asesinos multitudinarios, asesinos de gente inocente, de gente que no la debía, entonces no puedo creer que se le rindan honores”.
Sin Embargo