Si se le pregunta a alguien qué es lo que más le gusta de los perritos, probablemente diga que su suave pelaje, su cola que se mueve de acuerdo al estado de ánimo, su mirada, entusiasmo o su sonrisa.
Cualquier que se declare como amante de los canes no puede resistirse a las ganas de acariciarlos y jugar con ellos. Sin embargo no todos son iguales y cada uno tiene una personalidad diferente, donde algunos destacan más que otros por ciertos rasgos. Felipe es el vivo ejemplo de ello, un cocker spaniel de 13 años que se ha hecho famoso en Twitter por su cara de enojado.
A su dueña Paola le llama la atención el ceño fruncido que caracteriza a su mascota, motivo por el que decidió compartir imágenes de él en la red social.
“Hilo de Felipe haciendo gestos que me hacen pensar que es un señor que reencarnó en un perro”, dijo la joven en Twitter. Las fotos respaldan las sospechas de Paola, donde se puede ver al cocker con una mirada intimidante y cara de “pocos amigos”,
Esto llama la atención al ser una raza que es conocida por su personalidad cariñosa y animada, lo cual demuestra que nunca hay que juzgar. Aunque es algo que se queda en la apariencia porque Paola aseguró que es amoroso. “Juro que sí me quiere”, dijo en la publicación.
Por muy difícil que sea de creer, Felipe es un perrito tierno y cariñoso, aunque cueste no dejarse engañar por el gesto en su rostro. Se ve así incluso cuando descansa sobre el sofá.
El hilo de Twitter ha sido compartido más de 17 mil veces y ha obtenido 214 mil “me gusta”. Los usuarios se han enternecido con el can y se han tomado la situación con mucho humor. “El perro en vez de ladrarle a los niños, les grita que no pisen su césped”, bromeó alguien en la red social refiriéndose a la “posible” reencarnación que Paola mencionó como chiste.
El cariño para Felipe tampoco ha faltado, ya los tuiteros también expresaron su amor a él. “Te amo perrito enojón”, “Lo amé demasiado” y “Me alegró el día” fueron algunos de los comentarios.
La fama del cocker llegó a tanta que Paola le creó una cuenta de Instagram llamada @felipe.elcocker, para que quienes lo amaron puedan seguirlo y nunca perderse sus furiosas miradas. Aunque se rompió el mito de que siempre está enojado porque su dueña compartió una imagen de él sonriendo, para que quede comprobado que en realidad es un perrito feliz.
Felipe no es un cocker que se la pase todo el día enojado. Con todos los años que ha vivido, seguramente ha recibido mucho amor de sus dueños, por lo que sería un error pensar lo contrario. Un ejemplo de que nunca hay que juzgar por las apariencias.
Upsocl