Las altas temperaturas que han caracterizado las últimas semanas están teniendo un impacto preocupante en la salud de la población, con un notable aumento en los casos de enfermedades estomacales durante los primeros meses del año 2024.
Según datos proporcionados por la Dirección General de Epidemiología (DGE), se ha registrado un aumento del 36% en enfermedades infecciosas y parasitarias del aparato digestivo en comparación con el mismo período del año anterior.
Específicamente, se destaca un incremento del 52% en los casos de infecciones intestinales debidas a protozoarios, pasando de 145 casos en el mismo lapso de 2023 a 221 casos en lo que va del año en curso.
Asimismo, se ha observado un aumento del 35% en las infecciones intestinales causadas por otros organismos y aquellas mal definidas.
En cuanto a las intoxicaciones alimentarias bacterianas, se han reportado 545 casos hasta el momento, lo que representa un incremento de 405 pacientes en comparación con el año anterior.
Ante esta situación, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ha emitido una alerta, advirtiendo sobre el riesgo de consumir alimentos en descomposición o deteriorados durante la temporada de calor. Estos alimentos pueden desencadenar casos de diarrea, que si no son tratados adecuadamente, pueden conducir a complicaciones graves como la deshidratación.
Es fundamental que la población tome medidas preventivas, como mantener una adecuada higiene en la manipulación y preparación de alimentos, así como asegurarse de consumir alimentos frescos y correctamente almacenados para evitar el riesgo de enfermedades gastrointestinales durante esta temporada.
