El obispo emérito de Ecatepec, Onésimo Cepeda, se encuentra hospitalizado e intubado, debido a una infección por Covid-19.
El actual obispo de Ecatepec, Oscar Roberto Domínguez Couttolenc, afirma en una carta dirigida a Ramón Castro Castro, obispo de Diócesis de Cuernavaca y secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano, que en este momento su estado de salud es estable, aunque se encuentra intubado.
En la misiva, el obispo pide oraciones por la salud de Onéismo Cepeda y por todos lo que sufren de Covid-19.
De Onésimo Cepeda se sabe que ha sido novillero, le gusta el golf, es abogado, amigo de apellidos destacados y portavoz del Episcopado Mexicano. Pero poco se sabe de su paso por la teología de la liberación y su cercanía con Sergio Méndez Arceo.
Su biografía publicada en la página de internet de la diócesis de Ecatepec es el recuento de las relaciones bien cultivadas del obispo. Allí se dice, por ejemplo, que fue el gerente más joven en la banca privada, al ocupar a los 21 años ese cargo en el Fiduciario Banco de Londres.
Luego estudiante de filosofía, trabajó al mismo tiempo con uno de los hombres más ricos del país: Carlos Trouyet , y a los 27 años fundó, con Carlos Slim, Inbursa, “donde también colaboraron Alfredo Harp y Roberto Hernández”, según apunta su biografía.
También colaboró en algunas de las empresas más importantes de México como el Grupo Financiero Banamex, Banamex-Citygroup, Ingenieros Civiles Asociados (ICA) y Televisa, entre otras, de acuerdo con los perfiles sobre el obispo.
Nacido en 1937 en la Ciudad de México, estudió derecho en la Universidad Nacional Autónoma de México y luego ingresó al seminario del Instituto Nuestra Señora de Guadalupe para las Misiones Extranjeras.
En la Universidad de Friburgo, Suiza, estudió teología y fue ordenado sacerdote el 28 de octubre de 1970. Ocupó el puesto de rector del Seminario Conciliar de San José en Cuernavaca (Morelos) y en 1995 el Papa Juan Pablo II lo designó como el primer obispo de la recién creada diócesis de Ecatepec.
Presidió la comisión para las Comunicaciones Sociales de la CEM y fue asesor legal de ese organismo entre 1997 y 2000.
En 2012, el papa Benedicto XVI aceptó la renuncia de Cepeda solo 44 días después de que la presentó, tras haber cumplido los 75 años.
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