En la toma de posesión del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) este aseguró que su equipo ya no utilizaba el software de espionaje Pegasus, sin embargo, el pasado domingo una investigación realizada por la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D), dejó en evidencia que este actual gobierno no ha dejado de usarlo para espiar a periodistas y activistas.
Hasta ahora, al menor un activista y dos periodistas han encontrado en sus teléfonos evidencia del rastreo que las Fuerzas Armadas hicieron a su información personal. El Citizen Lab, el laboratorio de expertos de referencia sobre Pegasus, confirmó que los celulares de los periodistas Ricardo Raphael y de un colega de Animal Político, así como del activista tamaulipeco Raymundo Ramos Vázquez fueron intervenidos con Pegasus durante el actual gobierno de AMLO.
Los descubrimientos señalan que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) contrató en junio de 2019, más de seis meses después del inició de la Administración de López Obrador, a la empresa comercializadora Antsua, representante en México de NSO Group, compañía israelí dueña del malware Pegasus.
Además, dentro de la filtración de correos del Ejército que sucedió la semana pasada por el grupo denominado Guacamayos se puede observar una confirmación sobre el contrato realizado con NSO Group, quienes en varias ocasiones han explicado que sus únicos clientes son gobiernos.
De acuerdo con John Scott Railton, experto en Citizen Lab, los reportes son apenas “una señal de que hay muchos más casos que no se han encontrado, que no se han relevado pero que están ahí”. Pues las víctimas de este espionaje fueron atacados con una versión más avanzada de Pegasus en comparación con el sistema utilizado durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.
Según la investigación, a estas tres víctimas se suman otros casos probados que serán revelados en días posteriores; pues esto solo es la punta del iceberg del espionaje gubernamental actual:
“Nuestro análisis de las operaciones de NSO y de Pegasus nos llevan a estar convencidos que Pegasus sigue siendo operacional en México”, mencionó John Scott Railton.
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