Miles de historias de mascotas se presentan a diario, pero existen algunas que son dignas de ser contadas y reconocidas como esta de Débora, una perrita criolla que evitó gracias a sus ladridos un tragedia en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, luego de que unos sujetos le prendieron fuego al negocio de una familia.
La historia de este peculiar lomito tuvo un final feliz pese a lo aparatosas de las imágenes, en las que se ve un incendio que estuvo a nada de arrasar con todo lo que estaba en ese momento, entre ellos el can y los dueños del mismo sitio.
De acuerdo a los dueños del lugar, los hechos se presentaron el pasado 31 de mayo por la noche, cuando un sujeto se acercó a la tienda, tomó thinner, lo arrojó al lugar y acto seguido prendió fuego.
La perrita descansaba tranquila en el local comercial y al ver el fuego comenzó a ladrar sin parar, lo que alertó a Orbey, dueño de la casa y del negocio, quien ante los intensos ladridos del animal reaccionó de inmediato y no solo salvó su patrimonio, también la vida de su prometida y los otros tres lomitos que con ellos viven.
Todo lo anterior quedó grabado por la cámara de seguridad que el tendero tiene instalada en su negocio, gracias a lo cual pudo publicarlos en redes sociales, desde donde se hizo viral dado el acto heroico de Débora, quien ya es catalogada como un Súper Can.
Tras ser colgado el video en redes sociales, miles de usuarios preguntaron por el estado de salud de la peludita, quien por fortuna se reporta bien de salud, sin embargo fue necesario en su momento trasladarla con el veterinario debido a la inhalación del humo y demás químicos.
Debido al incendio, Débora inhaló mucho humo y estuvo enferma con vómitos y ardor de los ojos. Fue llevada al veterinario y ahora se encuentra totalmente recuperada”, explicó Orbey a medios locales.
Débora fue adoptada tras el incidente
De acuerdo a su ahora dueño, Débora era una perrita que vivía en las calles de una colonia de Tuxtla Gutiérrez, la cual enfrentó a las inclemencias no solo del tiempo, también de las personas que suelen mostrar su lado oscuro con los seres de cuatro patas.
A pesar de que algunos vecinos la procuraban, existía uno que la golpeaba a menudo, por ello Orbey y su familia un día decidió resguardarla por una noche en la tienda de abarrotes. Y fue justo esa velada cuando ocurrió el siniestro, del cual la Súper Can salió avante.
Débora en su nuevo hogar. (Especial)
Tras los hechos de esa noche, el hombre y su familia tomaron una decisión definitiva que le cambió la vida a ellos y a la peludita, pues decidieron adoptarla como una forma de recompensar a la perrita por haberlos salvado.
Ahora Débora tiene un cálido hogar, ya no sufre las golpizas por parte del vecino y demostró que su vida tiene un gran propósito, pues cabe señalar que sobrevivió a tres intentos de envenenamiento por parte de las personas que habitan las calles por las que ella solía pasar sin hacerle daño a nadie.
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