El Radar
Por Jesús Aguilar
Si Paloma Blanco López fuera una comediante de centro nocturno, habría logrado la ovación… de la indiferencia.
En el más reciente proceso electoral judicial, la presidenta del CEEPAC de San Luis Potosí no sólo ha sido “ninguneada”, sino que ha autoexiliado su rol: en lugar de árbitro con temple, se transformó en ventrílocua que repite un libreto palaciego.
Lo admitió con cara de circunstancia, resignada… y sin registrar un solo respiro de autoridad.
Dos episodios desgarradores pintan de cuerpo completo el triste balance:
En Mexquitíc de Carmona durante la jornada electoral, un grupo de hombres armados irrumpe y sustrae 10 boletas de cada una de las 9 elecciones sumadas entre la federal y local. La forma irracional e ilógica fue el burdo remate, no las supieron llenar y sometieron a los responsables para que lo hicieran y así cumplieron su encomienda y en el machismo neo electoral más bizarro “embarazaron” las urnas para huir sin reparos. La acción responde a un plan orquestado, no espontáneo: es la confirmación de un control criminal que exhibe la fragilidad del CEEPAC frente al caos. La complacencia brutal de un ente público y “ciudadano” que con su liderazgo se desvanece.
El otro espacio donde la comedia negra coronó fue en la comunidad de San Bartolo en Rioverde, ahí también se registraron graves irrupciones violentas, ataques directos a la jornada electoral, con agresiones que desbordaron los protocolos y el limitado equipo desplegado. El CEEPAC —con una presidenta que restó importancia a muchos casos— reaccionó tarde y mal. En lugar de gritar libertad, solo se escucharon disculpas tibias: “no hay daño confirmado”.
Un liderazgo sin recursos… ni estatura
Paloma Blanco se ha convertido en sinónimo de burocracia inflada y autoridad vacía:
• Sin tamaño político: Dispuso atraer los cómputos de cuatro municipios (incluidos Rioverde y Mexquitíc), pero solo tras advertencias extremas o presiones partidistas.
• Sin músculo operativo: Carece de capacidad para garantizar seguridad, no desplegó filtros efectivos ni denunciantes ante la violencia desatada por pistoleros.
• Sin voz legítima: Ha minimizado o desestimado hechos graves. Un detonante con pólvora, un petardo arrojado… todo fue “sin confirmarse”. Esa temerosa responsiva no es liderazgo: es capitulación.
¿Quién defenderá la confianza ciudadana?
Expertos académicos alertan: cuando un órgano electoral pierde rigor técnico, la legitimidad se diluye. Alejandro MonsiváisCarrillo lo explica con claridad: “la fortaleza depende de estándares claros, vigilancia y profesionalismo técnico”. Si esos elementos desaparecen, la credibilidad se va con ellos.
Aquí la tragedia es doble: no solo está de hundimiento la institucionalidad local, también está en riesgo la elección de 2027, cuando se renovará la gubernatura, el congreso local y los 59 ayuntamientos.
Si el CEEPAC sigue siendo una comparsa sin activos estructurales, el futuro es sombrío para la democracia municipal.
El reto impostergable: reconstruir autonomía
Es urgente que el INE y los OPLES regresen a ser guardianes autónomos, con sentido técnico y autoridad moral, no comisarios de seguridad. Deben blindar:
• Recursos reales: no solo en numeraría, también en capacitación y protocolos.
• Protección institucional: esquemas de seguridad especializados, incluso guardias permanentes, para blindar a consejeras y trabajadores electorales.
• Actuaciones oportunas: denuncia inmediata, protocolos claros, sanciones ejemplares.
Tenemos derecho a elegir sin balazos, sin boletas adulteradas, sin árbitros que callan. Si no, en la elección de 2027 corremos el riesgo de que otra Paloma estalle… y esta vez, toda la democracia se vaya con ella.
La frase que debe pesar en la insignificante Presidenta del CEEPAC potosino es… si no puedes renuncia… y a todas luces no has podido ni articular palabra.
¿O no?
RECADERO
• Muchas voces ponen como episodio premiere de la nueva temporada política potosina a la figura del alcalde de Soledad Juan Manuel Navarro ya como una realidad consolidada como el tapado emergente en la puja por la desatadísima carrera por ser el ungido del 2027. Chole no está chola, sugieren desde varios frentes…
• En los terrenos del poder judicial una de las pocas cosas que festejan muchos es la abrupta caída del neo Morenista Juan Paulo Almazán Cué al que al parecer no le alcanzó su campaña y méritos entre la burocracia cuatroteísta para aferrarse al hueso… Ya era hora!
