El Nobel de Literatura recibió un Doctorado Honoris Causa por la UASLP en 2005
Mario Vargas Llosa, uno de los autores más trascendentales de la literatura contemporánea, falleció este domingo a los 88 años de edad. Su legado es global, pero San Luis Potosí también figura en su historia personal y académica, pues fue aquí donde recibió un Doctorado Honoris Causa por parte de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP).
La ceremonia tuvo lugar en diciembre de 2005, en el histórico edificio central de la universidad, con la presencia del entonces rector Mario García Valdez y el gobernador Marcelo de los Santos Fraga.
El reconocimiento fue entregado “por ser un escritor de excepción, universitario y humanista de singular sensibilidad”, según lo aprobado por el Honorable Consejo Directivo Universitario de la UASLP.
Durante el evento, el autor de Conversación en la Catedral, La ciudad y los perros y La fiesta del chivo, ofreció un discurso profundo sobre la literatura, la creación artística y su papel en la sociedad.
“Escribir es la tentativa imposible de, con el débil material de las palabras, construir una realidad alternativa”, dijo el autor peruano ante una audiencia universitaria emocionada.
“Una sociedad impregnada de buena literatura difícilmente puede ser manipulada y domesticada por los poderes de esta tierra”, sentenció.
Cinco años después de aquel homenaje en San Luis Potosí, Vargas Llosa recibiría el Premio Nobel de Literatura en 2010, consolidando su estatura como una figura clave de las letras universales.
Hoy, tras su partida, la UASLP y la comunidad potosina recuerdan con orgullo el día en que Vargas Llosa fue honrado en su ciudad, pasando a formar parte de su historia cultural y académica.
