San Luis Potosí enfrenta importantes desventajas en la atracción de inversiones relacionadas con el nearshoring, según revela un estudio del Instituto Mexicano de Competitividad (Imco). En comparación con otras entidades, el estado muestra carencias en sectores clave como la educación, el acceso al agua y la disponibilidad de vivienda, factores que lo ubican en el lugar 27 a nivel nacional en cuanto a atractivo para la inversión.
El informe titulado “Nearshoring: prioridades para el desarrollo nacional”, publicado recientemente, analizó 21 variables en diferentes estados donde se han asentado empresas como parte del proceso de relocalización de industrias más cerca de la frontera con Estados Unidos. Estas variables incluyen aspectos relacionados con el mercado laboral, los insumos básicos, la vivienda y el entorno regulatorio, elementos clave para evaluar el nivel de preparación de cada entidad para este fenómeno.
En cuanto a la educación, San Luis Potosí enfrenta un desafío significativo, ya que solo el 23.1% de su población económicamente activa cuenta con educación superior. Este porcentaje lo coloca en el puesto 22 a nivel nacional, muy por detrás de la Ciudad de México, que lidera con un 41%. Además, el estado se encuentra entre los que tienen la menor cantidad de instituciones de educación superior, con apenas 56 por cada millón de habitantes. La situación es similar en cuanto a las instituciones que ofrecen cursos de nivel profesional técnico, con solo 0.5 por cada millón de habitantes, ubicándose en el penúltimo lugar a nivel nacional.
La producción de vivienda es otro punto débil para el estado, con un indicador de solo 0.7 viviendas por cada 10 mil habitantes, situándolo en una posición baja en comparación con otras entidades. Además, la prestación de servicios básicos en San Luis Potosí es deficiente, especialmente en términos de acceso al agua entubada y drenaje, donde presenta una de las mayores proporciones de viviendas con este problema en la zona centro del estado.
El manejo de agua residual tampoco es una fortaleza para el estado. Al igual que en Aguascalientes, Chihuahua y Veracruz, en San Luis Potosí se trata menos del 50% del agua utilizada, lo que agrava aún más las dificultades para atraer inversiones.
En resumen, el estudio del Imco coloca a San Luis Potosí en una posición desventajosa frente a otras entidades, debido a sus carencias en infraestructura educativa, hidráulica y de vivienda, lo que impacta negativamente en su atractivo para el nearshoring y la inversión extranjera.
