Un grupo de cazadores furtivos ha causado indignación en la Huasteca potosina tras ingresar ilegalmente a un ejido en Ciudad Valles y asesinar a tres venados. Los sujetos no solo cometieron este crimen contra la fauna, sino que además exhibieron las imágenes de sus “trofeos” en redes sociales, provocando la denuncia de organizaciones ambientales.
La organización Selva Teenek Ecopark condenó el acto y presentó una denuncia ante la Guardia Civil Estatal y otras autoridades, exigiendo castigos ejemplares para los responsables. Además, señalaron la falta de vigilancia en la región, lo que ha permitido la caza indiscriminada de especies como venados, jaguares y aves en peligro de extinción.
Para combatir este problema, las autoridades han anunciado un plan de vigilancia con drones térmicos que permitirán detectar la presencia de cazadores furtivos durante la noche. Este esfuerzo se suma a investigaciones previas sobre casos similares, como la reciente muerte de un jaguar en la cordillera Tének, atribuida a un campesino que alegó defensa de su ganado.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ya investiga el caso y se espera que se tomen acciones legales contra los responsables. Mientras tanto, las organizaciones ambientalistas continúan exigiendo mayor protección para la biodiversidad de la Huasteca potosina.
