Por Luis Lauro Ramos Rodríguez. @lauroramosr.
Después de que en el Congreso de la Unión la ahora ex-diputada morenista Clara Luz Flores presentara una iniciativa para reformar los artículos 82, 115 y 116 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, la cual pretende evitar que se herede un cargo público a familiares de hasta segundo grado, esta promesa de la presidenta ClaudiaSheinbaum, convertida en iniciativa, parece que surtirá efectos mucho antes de lo esperado, planteando un escenario sumamente interesante.
Esta propuesta pasará sin mayor oposición, y con mucha más facilidad que, por ejemplo, la todavía sensible al Poder Judicial. T engo el presentimiento de que será una de esas reformas que, por temas más de conveniencia que de convencimiento, todos los legisladores, sin importar color o partido, votarán a favor. Incluidos, desde luego, los directamente afectados Ricardo Gallardo Juárez y Ruth González Silva.
Esta reforma, que “va a ser sano, va a ser bueno para todos”, Ricardo Gallardo dixit, obligaría al actual mandatario potosino a borrar de su lista de posibles sucesores a su padre y esposa, principalmente a esta última, que era la que más empeño estaba poniendo para posicionarse como prospecto. T anto es así que, de las tres inasistencias que ya registra desde que asumió como senadora, la del 13 de septiembre, día en que se declaró la aportación a la reforma judicial, la emperatriz consorte andaba repartiendo apoyos del DIF estatal en Ciudad Fernández.
Ante este escenario, lo lógico sería que en los próximos tres años Gallardo comience a trabajar en un perfil sucesorio competitivo, lo cual podría suponer uno de los retos másgrandes de su administración. Sus “hombres fuertes” están lejos de ser, hasta el momento, perfiles con buenas posibilidades de ganar. Fuera de Soledad, los nombres de José Luis Fernández, Gilberto Hernández, Leonor Noyola y Juan Manuel Navarro no parecen ser quiénes para contender por la gubernatura. Por su parte, Ignacio Segura y Sonia Mendoza vienen de descalabros fuertes en las últimas elecciones, pues ambos perdieron los cargos de senador y alcaldesa a los que, respectivamente, aspiraban. Guadalupe T orres a lo mejor si termina el sexenio.
La estirpe gobernante, RGC y compañía, deberían empezar a buscar aliados, amigos o, porlo menos, evitar despertar ánimos vengativos en los perfiles fuera de su partido. La primera opción sería convencer a Morena de generar una candidatura única y apegarse a la coalición que hasta ahora se ha mantenido a nivel nacional. En este hipotético escenario, Gallardo tendría que ceder poder, pues la negociación a nivel nacional sugiere que el o la candidata saldría de las filas del partido guinda, sumado a que el mandatario potosino no tiene buena relación ni en Palacio Nacional ni en el de Cobián. Es más, la diputada que presentó la iniciativa antes mencionada, ya pidió licencia para integrarse al equipo de la paisana Rosa Icela Rodríguez en la SEGOB.
La otra opción, que me parece la más probable, es que el gallardismo comience a tratar bien al presidente municipal de la capital, Enrique Galindo. Este último, siendo el más favorecido por el panorama político nacional, se convierte en el perfil más fuerte de cara al 2027. No lo digo por los rumores y sospechas de que EG pudiera ser candidato por Morena, ni mucho menos porque acepte la invitación al Verde que previamente, en público, se le había extendido. Más bien, hablo de un acercamiento prudente y respetuoso que se traduzca en gobernabilidad para su segundo trienio, con obras colaborativas, fuera de ataques mediáticos e intentos de doblegarlo y que pudiera facilitar un acuerdo en el cual, una vez que tengamos nuevo mandatario, no se tomen represalias inmediatas contra la administración saliente. Si acaso, un chivo expiatorio para taparle el ojo al macho: un Lutzow, un Pineda, un Stevens… Salvo que un milagro o un divorcio sucedan, esto se ve bastante viable.
AL MARGEN
No es por ser terco, pero creo que los habitantes de Villa de Pozos deben estar cada vez menos agradecidos de que los hayan hecho municipio. Hicieron todo tan a la carrera que están empezando a sufrir las consecuencias de una pésima planeación. No pueden pagarle a su personal, es fecha que aún no saben ni siquiera con exactitud el presupuesto con el que estarán operando en el futuro inmediato, sus rutas de transporte público han sido deficientes y, ante su crisis de agua, después de acordar un convenio con el Interapas, ya mejor están queriendo crear un nuevo organismo, insisto, sin saber siquiera si les va a alcanzar el recurso.
¡Ah! Pero ya dijo el diputado del Verde, César Arturo Lara, que Pozos está a todo dar como para levantar edificios. ¡Qué cosas!
Hasta el próximo martes.
