Un devastador accidente en Brasil ha cobrado la vida de al menos 12 estudiantes universitarios y ha dejado a 19 personas heridas en un choque entre un autobús y un camión. El incidente ocurrió la noche del jueves en la carretera Waldir Canevari, en el estado de São Paulo, cerca de la ciudad de Nuporanga.
El gobernador de São Paulo, Tarcisio de Freitas, expresó su dolor en las redes sociales y decretó tres días de duelo oficial. “Es una tragedia que nos ha dejado sin palabras”, comentó al referirse a la muerte de los estudiantes, quienes eran en su mayoría de la Universidad de Franca (Uniferran).
El conductor del camión, identificado como Eduardo Henrique Justino, fue detenido tras huir del lugar del accidente. Se encuentra hospitalizado y está acusado de “homicidio involuntario”. Aunque se le practicó una prueba de alcoholemia, esta resultó negativa. Justino alegó que perdió el control del vehículo, pero aún no se conoce con certeza cómo ocurrió el choque.
El autobús, que transportaba a 29 personas, regresaba de la universidad hacia São Joaquim da Barra cuando ocurrió el siniestro. La colisión, que ocurrió en una vía estrecha, destruyó un lado del autobús. Los equipos de rescate trabajaron durante horas para atender a las víctimas.
De los 19 heridos, 15 fueron dados de alta rápidamente, pero cuatro permanecen hospitalizados, incluido el conductor del camión. La mayoría de los heridos fueron atendidos en el hospital de São Joaquim da Barra.
La empresa de transporte del camión, J4 Transportes, informó que el conductor perdió el control debido a un deslizamiento. Mientras tanto, la empresa del autobús, G Ramos Transportes, envió a sus representantes al lugar del accidente para brindar apoyo a las víctimas y sus familias.
La Universidad de Franca también declaró tres días de duelo y suspendió las clases como homenaje a los estudiantes fallecidos, muchos de los cuales apenas comenzaban sus estudios. Este accidente se suma a una serie de trágicos siniestros viales recientes en Brasil, incluido uno en diciembre que dejó 41 muertos.
Las autoridades continúan investigando las causas del accidente, mientras que las familias de las víctimas enfrentan la dolorosa tarea de identificarlas. La carretera fue reabierta a primera hora del viernes, después de haber estado cerrada por varias horas debido al siniestro.
